El Bonaerense habló con Emilce Dalul, mamá de Abril Salina, la joven de 17 años que murió atropellada en San Miguel por un abogado que le quiso “ganar al semáforo”. ¿Cómo se sigue después de semejante tragedia?

Hay heridas que cicatrizan rápido y otras que no. Está claro que el caso de la familia de Abril Ayelén Salina pertenece al segundo grupo. Por eso, semana tras semana los allegados de la joven de 17 años que murió atropellada por un abogado que “le quiso ganar al semáforo” realizan publicaciones para recordarla y para exigir justicia.

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El Bonaerense habló con Emilce Dalul, la mamá de la adolescente, quien la recuerda todos los días y explicó cómo hace para seguir luchando por su hija luego de semejante tragedia y dolor.

Abril tenía sólo 17 años cuando el 2 de julio de 2021, pasada la una de la tarde, cruzó la Avenida Perón (altura Las Delicias) y un abogado la atropelló y le produjo su muerte. Según testigos y familiares de la víctima, el vehículo iba a alta velocidad y cruzó "en rojo".

Salina falleció camino al colegio. Ella quería ser traductora, estudiaba inglés desde pequeña y en ese 2021 terminaba la secundaria, para empezar la facultad en este 2022. Ya tenían listo todo para disfrutar de los mejores meses como egresados. Pero Sergio Andrés Díaz terminó con toda esa ilusión.

“Lo último de la causa es que nos notificaron de la posibilidad de un juicio abreviado pero me negué porque quiero un juicio oral y público para el asesino, Sergio Andrés Díaz. Supuestamente el juicio será el año que viene, por lo que estamos con tiempos "normales", se podría decir”, explicó la mamá de Abril.

Y agregó: “Como familia esperamos que sea una condena ejemplar. El máximo son 6 años, pero voy con la esperanza de que esta persona esté al menos algunos años tras las rejas, porque a mi hija le arrebató los sueños en un segundo, por una imprudencia, por querer ganarle al semáforo con exceso de velocidad”.

Sin embargo, los tiempos de la Justicia no son los mismos que los del cerebro humano y sus sentimientos. Para la familia, no es fácil superar y, por eso, la recuerdan todos los días en una página en su honor, que tiene muchas visitas.

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“A los pocos días que falleció mi hija me propusieron hacer una página en redes sociales. Y la verdad es que tiene muchísima llegada. Vemos que realizar posteos, contar la vida hermosa que tuvo, lo linda e inteligente que era hace que llegue a mucha gente”, expresó con emoción Emilce.

“En la página participamos los familiares. Cuando alguien quiere recordar a Abril, nos puede pasar el contenido y nosotros lo publicamos”, profundizó.

“Es una manera también de tenerla presente, una manera de pedir justicia. Sobre todo cuando ves tanta injusticia alrededor, con las penas cortas que hay. Estoy muy agradecida con todos por compartir”, aseveró.

Un duelo difícil, rozando lo imposible:

“Es raro todo lo que yo siento. Recién ahora, más de un año después, logro hablar sin quebrarme tanto. Porque quiero contar bien lo que pasó para tener justicia para mi hija. Mi duelo lo manejo refugiándome con mis amigos. Intento honrar y disfrutar la vida que ella no tuvo”, explicó.

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Sin embargo, no es nada fácil: “Tengo mis momentos, obvio, porque la extraño tanto, tanto. Este accidente ocurrió a una cuadra de donde estamos alquilando (por cuestiones económicas no me puedo ir) y todos los días paso por la esquina, donde hoy es casi un santuario. La tengo que luchar. Mi idea es que, cuando pase el juicio, irme de Buenos Aires”.

¿El municipio? Ausente:

“De parte del municipio no hubo solidaridad ni nada. Es más, pudimos ver lo que realmente le pasó a mi hija por el video de una aseguradora, porque los domos del municipio no funcionaban”, expresó la mamá.

Y en el mismo sentido, agregó: “El conductor había querido ensuciarla diciendo que iba con el celular. Hasta la misma policía del municipio llegó a decir que ella había cruzado mal cuando no era así”.

La inseguridad en San Miguel le arrebató un recuerdo de su nena:

“Ella tenía una cadenita que era de mi abuela. Mi mamá se la dio a Abril, que la usaba todo el tiempo. A mí mentalmente me hacía bien ponerme su cadenita. Y el lunes pasado (26/9) uno en moto me arrancó la cadenita del cuello y me lo dejó marcado”, contó.

Y agregó: “Sé que hay robos en todos lados todo el tiempo, pero nadie hizo nada con esto, ni el municipio. Me pasó donde hay un domo pero me dijeron que no funciona”.